A mí nunca me ha gustado el fútbol, la verdad es que me parece una tontería ¿Qué sentido tiene dar una patada a un balón blanco con pentágonos negros? Es un gasto de dinero estando en crisis y habiendo niños muriendose de hambre en el tercer mundo. Además nos peleamos por este juego y ¿Por qué no pueden jugar chicas? Encima es un deporte machista y ¿Por qué España tiene que estar representado por el fútbol y no por el baloncesto?Esto es algo que nunca entenderé, pero la verdad esta entrada no es para que tiremos la toalla, sino todo lo contrario. Ayer por primera vez en la historia la roja paso de cuartos, eliminando a Paraguay. Después del descanso empezó la acción. El árbitro estaba comprado eso sin duda, no es por apoyar a mi país, ni mucho menos, pero para los ilusos el que hace la ley, en este caso el árbitro, hace la trampa. Entre tarjetas amarillas a nuestro equipo, les toco a ellos lanzar un penalti en contra nuestra. Esa sensación de nervios, de emoción, de lágrimas en los ojos, no la cambiaría por nada. Por suerte, tenemos el mejor portero del mundo, Ikér Casillas que fue más rápido que una bala para matar. Después metimos nosotros un penalti, pero fue anulado por nuestro amigo el del silbato por la misera tontería de que un jugador tenía los pies en la línea del área, cosa que no era verdad, pero si no puedes con el enemigo, uneté a él ¿no? Segundo intento de penalti, esta vez Xabi Alonso no tuvo tanta suerte y después de hacernos dos faltas seguidas, por supuesto no pitadas por el árbitro, pero reclamadas por el juez de línea, seguimos jugando. Por fin llegó, en el minuto ochenta y tres esa sensación de poder demostrar que somos superiores, por fin lo logramos, ese sentimiento de ilusión, esa felicidad y necesidad de gritar ¡GOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOL! lo marcó el idolo del momento, David Villa ¡Y para guays nosotros! Pero se venía venir, compran al árbitro y aún así pierden, es normal, con trampas nunca ganarás, aunque diga mucho un papel, aunque tu país te apoyé y te quiera, siempre te quedará en la conciencia, te quedará dentro que has perdido, que sois unos fracasados, no por perder un partido, sino por ser unos falsos y no jugar limpio. Hoy, España esta más cerca de conseguir el sueño, nuestro sueño, porque no ganan veintidós jugadores, ganamos cuarenta y dos millones de personas. Confío y creo en la roja y estoy orgullosa de ella, aunque como he dicho al principio no trago mucho el fútbol, pero es mi país y no me avergüenzo para nada, si no me daría vergüenza a mi misma y si, quizás algunas cosas esten peores que otras aquí, pero no todo puede ser perfecto... "Un animal herido es aún más peligroso."
Leticia.F
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